Pareja se niega a abortar y da la bienvenida a su “bebé milagro” a pesar de un diagnóstico equivocado.


Por Nancy Flancers para Live Action
Traducido por Ana Correa para Defensores De La Vida

A bebé Matthew lo llaman “milagro” después de que sus padres supieron que su diagnóstico fue equivocado durante el embarazo.  Pero hay otro milagro en su historia.  Matthew es una bendición para sus padres quienes se rehusaron a abortarlo pese al diagnóstico médico prenatal. 

En la semana 23 de gestación, Drew y Ariann Corpsteinfueron informados que su bebé tenía malformación en el tejido cerebral y que su cerebro no estaba bien desarrollado.  Lo diagnosticaron con holoprosecefalia semi lobular, una condición en la que los hemisferios cerebrales sólo se dividen parcialmente.  Los doctores dijeron que no había esperanza de que sobreviviera y que seguramente moriría antes de su nacimiento.  Los doctores le dijeron a la pareja que abortara o que adelantara el parto y dejara morir al bebé.  Esta pareja cristiana, quienes ya habían sufrido un aborto espontáneo antes, se negaron a abortar y empezaron a planear cómo se despedirían de su hijo. 

“Durante el ultrasonido de la semana 20, el cual llevó a muchos otros, y a una tomografía en los que los doctores descubrieron que nuestro hijo no tenía la mayor parte de su cerebro,” ellos escribieron en su página de GoFundMe, “En lugar de cerebro, tenía fluido espinal cerebral.  El fluido continuaría expandiéndose en la cabeza de nuestro bebé.  El tamaño de la cabeza era como de tres semanas más de lo normal.  Nos dijeron que nuestro bebé no viviría más que unos días, si no es que horas, o que moriría antes de nacer.”


Los padres del bebé Matthew se negaron a abortarlo y se dedicaron a hacer recuerdos pues pensaban que su hijo moriría antes de nacer. 

La pareja se dedicó el resto del embarazo a celebrar el poco tiempo que les quedaba con su hijo.  Hicieron recuerdos de cómo él “llenó sus corazones con felicidad” en lugar de pensar sólo en la tristeza que vendría.  Lo llevaron a andar en moto y de vacaciones -un viaje a Costa Rica.  AriannCorpstein dijo al Registrador de Des Moines: 

“Sabíamos que nuestro bebé probablemente no nacería con vida. Pase lo que pase, está en manos de Dios.”

El 27 de julio de 2018, la pareja fue informada que era tiempo de inducir el parto porque la cabeza del bebé ahora medía de 4 a 5 semanas de más.  Después de dos días de labor de parto, el 29 de julio, la pareja dio la bienvenida a su bebé, Matthew James, quien sorprendentemente estaba vivo y regulando su propio pulso cardiaco. Pero no sólo eso, sino que instintivamente comenzó a alimentarse de su madre.  Sus padres esperaban que fuera ciego y sordo, e incapaz de sentir dolor, pero se sorprendieron al ver que reaccionaba ante la luz, las voces y el tacto. 

La pareja accedió a otra tomografía que demostró que Matthew había sido diagnosticado mal.  En realidad tenía hidrocefalia, una condición que causa líquido extra en el cerebro, pero tenía su tejido cerebral y ambos hemisferios.  Necesitó cirugía de emergencia para drenar el exceso de fluido y permitir que el tejido cerebral se expandiera a donde tenía que estar.  Sus padres dicen que ahora tiene “todas las posibilidades de tener una vida normal.”



“¡Simplemente no podíamos creer lo que oíamos!” Nos habíamos preparado los últimos 4 a 5 meses para no tener un bebé y usar un hospicio hasta que su vida terminara y ahora las posibilidades de Matthew de sobrevivir eran altas y de tener una vida tan funcional como era posible,” ellos escribieron en Facebook.  “¡Es como comprar un billete de lotería y ganar el premio mayor!” Estábamos extasiados.  Aún no puedo describir con palabras cómo nos sentíamos con esas maravillosas noticias.  Sabíamos que Dios nos protegía y a nuestro hermoso bebé, y habíamos puesto nuestra fe en Sus manos, pasara lo que pasara.”

Aún cuando Matthew está en riesgo de impacto neurológico, retraso motor y algunas discapacidades, su condición puede ser administrada, e incluso cabe la posibilidad de que no presente ninguna discapacidad.  Él se fue a casa el 4 de agosto después de menos de una semana en el hospital.  Después ellos fueron informados que su madre no tenía la capacidad de absorber la vitamina B12 y ácido fólico adecuadamente, lo que llevó a varias complicaciones, incluyendo la hidrocefalia. 

El adorable bebé, al que llaman “Matthew el Grande”, ahora se encuentra de nuevo en el hospital con meningitis, pero está respondiendo bien.  Los doctores dicen que el diagnóstico erróneo de malformación cerebral se debía a que es difícil diagnosticar a bebés de manera prenatal. 



“Cuando se usa tecnología de imagen, como una tomografía de un bebé que está dentro del útero de su madre, se ve algo que es muy pequeño y está muy lejano,” dijo la Doctora Jona Conklin, una perinatóloga que trabajó con los Corpsteins.  “Por ejemplo, si tratas de buscar un defecto de corazón, estás buscando en algo que tiene el tamaño de un cuarto de dólar entre todo el tejido del cuerpo de la madre y el cuerpo del feto.”

Pero, si diagnosticar un bebé de manera prenatal es tan difícil, ¿por qué tantos doctores ofrecen el aborto?, ¿Cuántos niños que son “queridos y deseados” terminan abortados porque no cumplen con el estándar de “saludable” impuesto por la industria del aborto? ¿Cuántos de ellos han sidodiagnosticados equivocadamente?  Matthew es el milagro de sus padres y ellos son el milagro de él porque se negaron a aceptar la cultura de la muerte.  Ellos sabían que su vida era valiosa y hermosa a pesar de lo que la sociedad diga. 

“Un buen amigo lo llamó Matthew el Grande por ser un milagro, y eso es exactamente lo que él es,” dijo la pareja. “Es nuestro pequeño milagro.  Un niño que se suponía que no nacería, y menos podría haber sobrevivido, nos ha enseñado que Dios nos protege y nos bendice más allá de lo que podemos imaginar.”

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