Bebé tan pequeño como una lata de refresco sobrevive contra toda probabilidad

Por Richard Hartley-Parkinson para Metro UK
Traducido por Ana Correa para Defensores De La Vida

Este es Theo Taylor, el más pequeño niño bebé jamás nacido en Gran Bretaña que sobrevive.  Theo dejó de crecer en el útero cuando pesaba lo que una lata de refresco y sus posibilidades de sobrevivir eran tan dudosas que los médicos le ofrecieron a su madre, Katie Rodes, de 24 años, la terminación del embarazo, un día antes de que él naciera.  Pero él desafió todas las probabilidades y lo logró aún pesando sólo 12 onzas.  

Luchó por sobrevivir y ahora está en casa con Katie y su padre Jay, de 27 años. 

Theo Taylor está finalmente en casa después de una asombrosa recuperación

Jay, conductor de mensajería, y Katie, descubrieron que dejó de crecer y les dijeron que esperaran lo peor.

Theo, quien ahora tiene 6 meses de edad, nació prematuramente a las 26 semanas y cinco días.  Se piensa que es el bebé más pequeño que ha nacido y sobrevivido en el Reino Unido.  Katie, una trabajadora de apoyo de Durham dijo: ‘Él es un pequeño guerrero.  

‘Antes de que naciera, era muy doloroso escuchar todo el tiempo que probablemente no sobreviviría, aún cuando ya había nacido, y no lo pudimos llevar a casa.’ ‘Pero lo logramos diciéndonos, “no, lo ha hecho hasta ahora, debemos apoyarlo”.  Estábamos positivos y diciéndonos que lucharíamos por él’. Papá Jay añadió: ‘Nunca había visto un bebé tan pequeño –No sabía que los bebés pudieran ser tan pequeños.”

‘Yo insistía en decir a Katie que todo estaría bien y que él estaría bien, pero no fue hasta que lo vi, que me di cuenta de lo serio que era esto.’ ‘Creo que nunca he estado tan asustado en mi vida, pero fue tan gratificante verlo’

Los padres de Theo dijeron que el embarazo fue normal hasta la semana 19 en la que se reveló que el bebé era mucho más pequeño de lo esperado.  Jay y Katie descubrieron que había dejado de crecer y les dijeron que esperaran lo peor y que se prepararan para su muerte en cada cita y en cada ultrasonido.  La futura mamá, Katie, fue hospitalizada con preeclampsia y tres días después los doctores realizaron una cesárea de emergencia cuando las pruebas demostraron que Theo tenía fluido en su corazón.  

 Él venció todas las probabilidades y a pesar de pesar sólo 12 onzas, luchó por sobrevivir y ahora está en casa con mamá Katie y papá Jay.

‘Todos fueron tan buenos y amables y dijeron que harían lo que fuera para ayudarlo, pero incluso hasta un día antes de su nacimiento nos ofrecían abortarlo,’ dijo Jay.  Los médicos esperaban que pesara 450 gramos -por debajo de los 500 g ideales a esa edad—pero cuando nación en marzo, 15, el pequeño Theo, solo pesaba 350 gramos en el hospital de Newcastle.  

Jay y Katie sólo pudieron tocar su manita por unos breves segundos antes de que lo conectaran a un respirador insertando el tubo más pequeño por su minúscula garganta.  Los doctores nos advirtieron que era tan pequeño que tal vez no sobreviviría y no podríamos llevarlo a casa’.  Pero sus orgullosos padres lo abrazaron y arrullaron después de dos semanas, cuando pasó a la sala de cuidados de baja dependencia cuando cumplió siete semanas y pesó 3 libras.

Jay dijo: ‘Era más pequeño que mi mano, mucho más pequeño de lo que pensé que sería, pero los doctores dijeron que no tuvo ninguna de las complicaciones usuales en bebés prematuros.’ ‘El doctor dijo que pesaba aproximadamente lo que una lata de refresco, pero aún cuando yo tomaba una lata, parecía más pesada que Theo.’

‘El día que nació un doctor dijo “No piensen que podrán llevarlo a casa.”  Pero Theo está demostrando que todos se equivocaron.  ‘Los doctores que lo estaban observando al principio, vinieron después de algunas semanas a verlo y no podían creer lo bien que estaba.’  Theo, quien debía haber nacido el 17 de junio, pudo ir a casa el 7 de julio, pesando 7 libras y 4 onzas, después de una operación que removió una hernia.

Aún está con oxígeno nasal en casa –pero no todo el tiempo, y los momentos sin soporte de oxígeno se han incrementado. Los doctores piensan que no sufrirá problemas a futuro debido a su nacimiento prematuro, dijeron sus padres.  

Katie dijo: ‘Es mucho más fácil estar con él en casa que en el hospital.’  ‘Sentimos que ha estado con nosotros mucho más que seis meses.’ ‘Es extraño pensar que él sea el bebé más pequeño que ha sobrevivido, ya que ahora se ve mucho más grande y está tan bien.’ Jay, quien también tiene un hijo de dos años con una pareja anterior, añadió: ‘Es asombroso pensar en cómo estaba y todo lo que ha pasado y en cómo está ahora.’  Las posibilidades de sobrevivir de un bebé de 400 gramos son cerca de un 25% pero de sobrevivir sin severo daño cerebral son sólo de 7%.  

El récord anterior para el bebé más pequeño del Reino Unido era de Franke Thompson, nacido en septiembre del año pasado en el Hospital St. Peter en Surrey, con 13 onzas, que son más o menos 370 gramos. La familia de Theo está reuniendo fondos para Tiny Lives, una organización caritativa que ayuda a bebés prematuros y a sus familias en Newcastle Royal Victoria Infirmary.