Diagnóstico prenatal incorrecto de Scarlett Jackson
Los Jackson siempre supieron que querían una gran familia desde el principio. Jennifer y su esposo Richard han disfrutado el estilo de vida familiar: bolos, películas, peleas de agua, estar juntos al aire libre y participar activamente en su iglesia.
En febrero de 2016, la familia Jackson descubrió que agregarían otro niño a su hogar y todos estaban emocionados. Jennifer ingresó a las diez semanas para las pruebas de Harmony, que es una prueba genética que ofrece una precisión del noventa y nueve por ciento en la detección del síndrome de Down en esta gestación. La prueba es bastante simple, ya que solo requiere una muestra de sangre de la madre embarazada.
Después de esperar pacientemente a que transcurrieran los 7 a 14 días, la familia Jackson recibió la noticia de que su bebé era positivo para el síndrome de Down. El especialista de Jennifer en la clínica de Medicina Materno Fetal de Shenandoah en Winchester, Virginia, sugirió con firmeza y sin vacilación que abortaran al bebé.
En muchos países del mundo, esta es una práctica común. De hecho, Islandia se enorgullece de sus estadísticas que muestran una población casi "erradicada" de personas diagnosticadas con síndrome de Down.
La celebridad a favor de la vida, Patricia Heaton, respondió elegantemente: "Islandia no está eliminando realmente el Síndrome de Down. Simplemente están matando a todos los que lo tienen. Gran diferencia".
Según CBS News, casi el cien por ciento de las mujeres en Islandia que recibieron una prueba positiva para el síndrome de Down abortaron al niño. Aproximadamente el ochenta y ochenta y cinco
por ciento de todas las mujeres embarazadas allí eligen participar en las pruebas. Islandia tiene solo uno o dos niños que nacen con síndrome de Down anualmente, lo que es asombroso cuando se compara con los nacimientos en los Estados Unidos en aproximadamente seis mil. Dinamarca está deseando seguir el ejemplo de Islandia, esperando ser "Síndrome de Down libre para 2030".
Considera todos estos hechos mientras te llevo de vuelta con la familia Jackson. Jennifer y Richard decidieron no seguir los consejos de su médico y continuaron con el embarazo. Más tarde tuvieron una hermosa niña que no tenía síndrome de Down en absoluto. Ella nació completamente sana sin problemas genéticos como se indicó en la prueba inicial a las diez semanas. Una prueba que afirma tener una precisión del noventa y nueve por ciento, junto con la presión para eliminar el síndrome de Down de la población, podría haberle quitado la vida a la bebé Scarlett Jackson. Ahora imagine, ¿cuántos de los niños abortados en Islandia, o en cualquier otro lugar, fueron asesinados por un falso positivo?
Para ser claros, el aborto también es horrible cuando el resultado de una prueba del síndrome de Down es exacto. Hay tantas personas felices y saludables en el mundo diagnosticadas con síndrome de Down. Ellos merecen la oportunidad de vivir. Justificar el asesinato de millones de niños para "limpiar" el mundo es una tragedia.
¿Cuántas de estas pruebas fueron incorrectas ya que la familia Jackson había experimentado? ¿Cuántos proveedores se toman el tiempo para ayudar a las familias a comprender realmente cuán feliz y sanamente puede vivir una persona con este diagnóstico?
Le insisto que miren a esta hermosa niña pequeña, Scarlett, nacida el 8 de octubre de 2016. A las treinta y nueve semanas. Ella pesaba seis libras y catorce onzas. Ella no ha tenido problemas médicos y está prosperando más de lo esperado a los trece meses de edad. Si su madre hubiera seguido el consejo del especialista; esta pequeña niña perfecta no estaría aquí hoy, trayendo alegría a todos los que ella encuentra.
Escrito por Heather Hobbs,
Editor y blogger en Life Defenders
Traducido por Mariana Fernandez Del Castillo
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